lunes, 4 de octubre de 2010

Cosas que pasan

Ayer fue el cumpleaños de una muy buena amiga de mi infancia, como no podía ser de otra manera la llamé para felicitarla y para hablar y contarnos nuestras vidas, porque aunque somos muy amigas nos llamamos muy de vez en cuando y con lo ocupada que he estado estos meses no me había dado cuenta que no hablabamos desde junio.

Enseguida noté que algo le pasaba y cuando me soltó la noticia bomba me quedé alucinada: su marido la ha dejado, sin previo aviso y de sopetón. Yo noté que no le apetecía hablar del tema y no quise preguntarle los motivos, pero no he podido evitar sentirme mal por ella, mal por mí por no haberla llamado antes y haber servido un poco, a pesar de la distancia, de hombro en el que llorar y por no haber sido la persona con la que se desahogase, como podría haberlo sido en otros momentos.

Me he pasado toda la tarde/noche de ayer pensando qué es lo que hace que una persona cambie de sentimientos de un día para otro, o si no ha sido de un día para otro, como la persona que tienes al lado no se da cuenta de que algo va mal y la ruptura le coje tan de sorpresa. Son tantísimas cosas las que pueden fallar en una relación, ¿pero es posible no darte cuenta de que la otra persona no es feliz, o no te quiere, o tal vez ha conocido a otra persona? Ya no sólo hablo del caso de mi amiga, sino en general, ¿realmente es posible vivir una relación de pareja, con una persona con la que convives diariamente, sin darte cuenta de que algo va mal? Yo, personalmente, creo que o la otra persona es un gran actor, o tienes que ser consciente de que algo pasa y pienso que es mejor ser consciente porque así tienes la oportunidad de luchar por esa relación si crees que merece la pena. Sin embargo, si vives a ciegas bien porque no quieres ver o porque realmente la otra persona no muestra ningún cambio, creo que el golpe es mucho más duro.

domingo, 3 de octubre de 2010

Ya no son 26, sino 27

¡Cuánto tiempo llevo sin pasarme por aquí! Como siempre, no tengo tiempo para nada, pero hoy que me he tomado "libre" la tarde me he dicho que sí o sí tenía que actualizar el blog... lo de pasarme por los vuestros y ponerme al día no sé cuando podré hacerlo... espero que pronto.

Ya llevo dos meses en mi nuevo puesto de trabajo y sigo contenta. Mis compañeras son majísimas y hay muy buen ambiente. El trabajo no es que sea mi trabajo soñado, pero bueno, no está mal y no me quejo. El horario si no tuviese que estudiar e ir a la academia tampoco estaría mal, pero me está costando mucho compaginarlo con el estudio y éste (aparte del blog, claro) es lo que más se está resintiendo. Hablando del estudio, ayer tuve un exámen de una de las oposiciones a las que me presento este año; la verdad es que no lo llevaba bien preparado porque aunque estudio todos los días, las pocas horas que hecho lógicamente no son suficientes y también tengo que dedicarle tiempo a la oposición de economistas porque en la academia nos mandan mucho trabajo para casa, pero bueno, yo creo que me salió mejor de lo que esperaba, así que a ver qué tal.

Por otro lado, esta semana pasada ha sido mi cumpleaños, por eso el nombre de este post. El día 27 cumplí 27 años, esto no pasa todos los años, ¿eh? jejejejeje. La verdad es que siempre me ha gustado cumplir años y celebrarlos, pero este año he tenido una pequeña crisis (muy pequeña) porque de repente me he visto muy cerca de los 30 y yo, en cuanto a experiencias vitales, me siento como si no hubiese pasado de los 21, no sé por qué me pasa esto, pero la verdad es que hablando con todas mis amigas de mi edad a ellas también les ha pasado algo parecido. Sé que es una estupidez y que lo bueno de cumplir años es, precisamente, el poder cumplirlos y si es con salud, todavía más. Lo mejor de este cumpleaños es que mis padres han estado aquí, sólo cuatro días, pero al menos han venido y lo hemos pasado genial. Hemos estado en Toledo y en Oropesa (la de Castilla La Mancha, no la de Castellón), les hemos enseñado Talavera, hemos comido un montón y ellos se han ido con muy buena impresión de la zona y a mí me ha encantado tenerles aquí. Muchas gracias a las que os acordasteis de mi cumple y me felicitasteis, especialmente a Maeva que tuvo el detallazo de dedicarme un post y de enviarme una postal que me hizo mucha ilusión y que me llegó justo unos días antes del cumple.

Otra novedad ha sido que he retomado las clases de alemán, direis que estoy loca si no tengo tiempo para nada, pero me apetecía volver e iré cuando pueda y lógicamente cuando no pueda, no iré.

Tengo muchas cosas pendientes. No me olvido de que tengo pendiente hacer un sorteo, todavía no he decidido qué voy a sortear, tengo que pensarlo, comprarlo y sortearlo, jejejejeje. También tengo pendiente un meme al que me ha nominado M y subir varios premios que tengo pendientes desde el año de María Antoñeta, a ver si encuentro el momento para hacerlo todo.

No me quiero despedir sin desearle a Duna, que no está pasando por su mejor momento, que se recupere prontísimo y que pueda volver a su casa y a su vida normal lo antes posible, y que si sólo dependiese de los buenos deseos que te enviamos desde la red, seguro que lo consiguirías en breve.

¡Un beso muy fuerte!